martes, 28 de julio de 2020

Rivalidad entre hermanos


 ¿Que pasa con mis hijos?
Por: Laura Medina

La rivalidad entre hermanos es una parte natural del crecimiento que se da muy a menudo; hay muchos factores que pueden interferir en la relación de tus hijos, como la diferencia de edad, el sexo, la personalidad o el tamaño de la familia, no obstante, existe un peligro constante cuando la rivalidad pasa de ser algo natural a un comportamiento ansioso u hostil, que pueda llegar a durar muchos años, lo que suele ser frustrante y estresante para los miembros de la familia.

Algunas manifestaciones de rivalidad entre hermanos se evidencian en los golpes, los insultos, las peleas y el comportamiento inmaduro (Artola, 2017). Por lo general, los niños más pequeños tienden a pelearse físicamente, mientras los niños mayores son más propensos a tener peleas verbales (Rady Children's, 2002).
¿Por qué se da la rivalidad?
  • El deseo de obtener para sí mismo la atención de los padres.
  • La inseguridad puede llevar a formar ideas que no son acordes a las situaciones, cómo, por ejemplo: “él es el preferido”, “mi hermano es mejor que yo”, “quieres más a mi hermano que a mi”
  • Por estilos de crianza permisivos, sobreprotectores o autoritarios, donde se dan mensajes confusos a los niños frente a su comportamiento.

¿Cómo lo podemos abordar desde casa?
  • Alienta a tus hijos a conversar sobre las diferencias que existen entre ellos.
  • Ayúdales a entender que los problemas se solucionan dialogando y enfócate en siempre adoptar una postura neutral.
  • Evita hacer comparaciones, ya que hacerlas puede hacerlos sentir mal e inseguros.
  • Felicita cuando veas que el trato entre los hermanos es respetuoso y   logran trabajo en equipo.
  • Realiza actividades que se enfoque en los gustos de cada niño, ya que sus intereses pueden variar.
  • Establece reglas básicas de cual es un comportamiento respetuoso y cual no en el hogar, por ejemplo: No está permitido insultar a ningún miembro de la familia.

viernes, 24 de julio de 2020

¡Juguemos!


ALGUNAS IDEAS DE ACTIVIDADES PARA NIÑOS CON DISCAPACIDAD

Las discapacidades intelectuales comunes incluyen el autismo y el síndrome de Down. Aquí te presentamos algunas opciones para pasar tiempo de calidad y a la vez de mucho aprendizaje.
  • Juegos de Equilibrio: pintar líneas en el suelo y seguirlas con los pasos, utiliza también juguetes como zancos, columpios, tablas de equilibrio y circuitos.
  • Paseos: un paseo, siempre es una mezcla de diversión, desafíos, emoción y movimiento. Juega a medida que vas paseando, cuenta historias y también puedes cantar.
  • Imitar una imagen: muestre una imagen de un árbol. Pida a los niños participantes que posen como un árbol. Muestre otros objetos y haga que  imiten esa imagen.
  • Collage: dé a sus niños una variedad de materiales como recortes de  tela,  fieltro,  muestras , hilos ,  botones,  etc. Déles pegamento y papel de embalaje y haga un collage. 
  • Fabricación de abanicos: en un día caluroso, corte algunas muestras de papel (si es grueso mejor).  Doble el papel por la mitad y luego hay que plegarlo al estilo acordeón. Sujetamos o pegamos uno de los extremos y usted tiene un ¡abanico para mantenerte fresco!
  • Congelar: ponemos una melodía pegadiza. Los niños caminan por la habitación. Cuando la música se detiene,  “se congelan” y mantienen esa posición hasta que suene de nuevo la música. Nadie se queda  fuera de este juego. Se juega por diversión. Continuar con la música y jugar más y más.
  • Paseo en manta – sentarse o sentar a un niño en una manta y tirar de ella alrededor de la habitación …. Uauu!
  • Pintar piedras – encontrar rocas al aire libre (sí, esto puede ser una actividad en sí misma). Regrese a casa y pinte la piedra.
  • Hacer palmas al ritmo de la  música – música y juego. Los participantes tienen que palmear al  ritmo de la música …          
     
  • ¿Realizaste alguna de estas actividades con tu hijo? Cuéntanos tu experiencia!

martes, 21 de julio de 2020

Hablemos de la Discapacidad Intelectual

Hablemos sobre Discapacidad Intelectual (DI)
Por: Sandra Liliana Rodriguez Campos
Para empezar a hablar de discapacidad es necesario explicar de manera precisa este término.
Como se define en el manual de Discapacidad Intelectual de la AAIDD (American Association on Intellectual and Developmental Disabilities) la discapacidad intelectual se caracteriza por limitaciones significativas en el funcionamiento intelectual y la conducta adaptativa conceptual, social y práctica; se origina antes de los 18 años (2011, p. 42). Esas limitaciones del funcionamiento se deben considerar en el contexto comunitario de los iguales en edad y cultura; tiene en cuenta la diversidad cultural y lingüística, así como las diferencias en comunicación y en factores conductuales, motores y sensoriales; las limitaciones coexisten con capacidades; un objetivo importante de la descripción de limitaciones es el desarrollo de un perfil de necesidades de apoyos; y con los apoyos personalizados oportunos mantenidos a lo largo de un periodo, el funcionamiento de la persona con DI mejorará. 

Por lo anterior, la discapacidad intelectual hace referencia a un estado de funcionamiento específico que comienza en la infancia, es multidimensional y se ve afectado positivamente por los apoyos individualizados.
Para una comprensión adecuada de la noción de DI se sugiere un enfoque ecológico y multidimensional que refleje la interacción del individuo con su entorno. Las ventajas de comprender la naturaleza multidimensional de la DI son que:  

Reconoce las inmensas complejidades biológicas y sociales asociadas a la discapacidad.



 Captura las características esenciales de una persona con esta discapacidad 


Establece un marco ecológico para la provisión de apoyos.


Para profundizar lo anterior nos remitimos a lo planteado en el Manual de Discapacidad Intelectual donde se plantea que existe una evidencia clara de que la conexión entre los individuos y sus entornos facilita el funcionamiento humano. La facilitación de tal conexión incluye determinar el perfil e intensidad de las necesidades de apoyos para una persona particular y proporcionar los apoyos necesarios para mejorar el funcionamiento humano; estos apoyos son estrategias y recursos que promueven el desarrollo, la educación, los intereses y el bienestar de una persona y mejoran su funcionamiento individual. (Instituto de Medicina, 1991; Luckasson y 36 cols, 1992, 2002; Organización Mundial de la Salud, 2001).

El contexto describe las condiciones de interrelación de las personas y representa una perspectiva ecológica que incluye tres niveles como son:

A
El entorno social inmediato que incluye la persona y la familia; en nuestro trabajo se inicia por reconocer ese primer nivel de interrelación para proporcionar al niño y su familia herramientas para un ejercicio incluyente favorable para su desarrollo y evitar prácticas que lo excluyan de los entornos
B
La escuela y la comunidad, en este nivel se busca estructurar herramientas para  los miembros de la comunidad y así favorecer una práctica incluyente.
C
Los de influencias sociopolíticas, en este último nivel, lo que se busca es un cambio de pensamiento frente al abordaje de la DI.


Por todo lo anterior, nuestro interés es apoyar a las familias  para construir una cultura incluyente en cada uno de los ámbitos en los que la persona con discapacidad participe.





Contacto +573204892834