Somos buenos padres...

 No somos pareja y somos buenos padres

Uno de los retos que más se presentan en padres separados es llegar a acuerdos en rutinas, normas y reglas, que logren mantener la estabilidad en la crianza y no generar más afectación emocional en los hijos. Nunca la separación conyugal puede afectar el vínculo parental, pues la participación tanto de mamá como de papá es vital en el crecimiento y establecimiento de la identidad.

En Colombia las cifras de separaciones aumentan a diario y cada vez más niños y adolescentes deben asumir la ausencia de alguno de sus padres (El Tiempo, 2016). 

La base para que esta relación de padres funcione, es que cada uno pueda asumir su responsabilidad de la ruptura amorosa, resolver los temas de pareja que aún están inconclusos, solo de esta forma la comunicación puede fluir para luego tomar decisiones frente a los hijos. 

A continuación, daremos algunos tips para llegar a acuerdos en la crianza:

• El respeto entre los padres refleja también respeto hacia los hijos.
• No intente aliarse con alguno de sus hijos con el fin de ganar más autoridad, esto solo va a generar una ruptura mayor en el vínculo afectivo.
• Si bien es cierto que ya hay una sensación de abandono en los hijos, la distancia física no debe ser impedimento para dejar de involucrarse con ellos, procuren realizar actividades como familia, donde se pueda compartir en paz y en pro de una buena convivencia.
• La separación no puede llevar a los padres a desarrollar sobreprotección, pues esta impide construir la autonomía e independencia necesarias para desempeñarse en la vida.
• El objetivo principal será que los hijos se sientan seguros y confiando de acudir a cualquiera de sus padres, cuando tengan alguna dificultad.
• Si aparecen comportamientos de desobediencia comuníqueselo al otro padre, con el fin de llegar a una solución.
• Es vital que el padre con quien conviven los hijos permita la comunicación con el otro y que cada uno aproveche al máximo el tiempo que pasa con ellos.
• Padre y madre deben programar los encuentros con sus hijos, definir las temporadas de convivencia y los días que compartirán.  
• Cumplir con las fechas y las horas establecidas les da seguridad a los niños y les permite programar sus propias actividades.

REFLEXION PARA FINALIZAR

Es necesario que los padres entiendan que un proceso de separación toma tiempo y que tanto los hijos como la pareja se deben permitir un espacio necesario para los cambios, sin olvidar que los pequeños aprenden con el ejemplo y al igual que los adultos necesitan ser atendidos durante el tiempo de la ruptura, pues todos sufren el duelo de la separación.